miércoles, 29 de diciembre de 2021

Más larga que un paseíllo de Romero


    Así está siendo la espera por conocer el ansiado cartel del Domingo de Resurrección hispalense. Si es cierto que "lo bueno se hace esperar", tómese su tiempo entonces, D. Ramón. De todas formas, la afición de Sevilla, este año más que nunca, trae renovada la fe currista, basada en la espera como Comunión eucarística de cada semana. Por los lares baratilleros se sabe esperar.

    No obstante, no sé yo si va a ser buena idea eso de "hacer el cartel que diga Sevilla". Espero tener una sordera como la Puerta del Príncipe, mas por los corrillos taurinos no hay buenas habladurías. Apuestan varios "aficionaos" sobre la susodicha combinación en cuestión. Que si Roca Rey, que si Manzanares, que si El Juli... Hombre por favor. ¡Si fuera una inocentada, todavía! En las grandes citas de esta temporada no posee cabida el "destoreo". ¡Pa' una vez que se pone la cosa medio interesante, señores!

    En primer lugar, la presencia de Morante, como dijo Joselito: "por consabida se calla". Hablar de ello es perder tinta. Llegan ahora los infantes de la Corona. Y afortunadamente no son escasos, todo sea dicho. Vamos a dejarnos de cachondeo y a empezar hablar de Pablo Aguado, Juan Ortega, Diego Urdiales o De Justo, como nuestros antepasados hablarían de Pepe Luis, Juan Belmonte, Chicuelo o Frascuelo, respectivamente. 


    Y no por ello será menos vital este 2022 para los citados maestros. Con algo de mayor hincapié sobre las hombreras de Aguado. Dicen que "cuando te esperan y faltas, te esperan dos veces". Y duda no concibo de que este año los tendíos' de la Maestranza esperaremos cuantas necesario sea. Tiene mucho que volver a meter en el esportón -si Dios lo quiere- el torero de berenjena y oro, máximo exponente del concepto sevillano. Y como esto de torear con la palabra, no solamente es una simple e insignificante opinión, sino que también permite mover al toro libremente de terrenos, lo que considero honestamente el mayor defecto que le impide crecer más si cabe, es haber estudiado. La tontería que acabo de decir es "menúa". Suena contradictorio, pero también le ocurre al Pasmo de Triana del siglo XXI: a Juan Ortega. El exceso de diplomacia, decoro y saber estar que cultiva una carrera universitaria arrasa esa pincelada única, esa personalidad diferente tan necesaria en un torero para persistir en los temas de conversación de ambientes taurinos. Es precisamente la personalidad una de las virtudes que identifican a Morante.


    Con esto no me refiero a la personalidad de llevar a cabo sus respectivos conceptos: eso lo cumplen a rajatabla. Intento hacer referencia a la actitud frente al toro, lo que puede percibir cualquier tipo de público, el DNI vestido de luces. Tampoco dudo que algún día terminarán adoptándola. El alma torera está ahí, lo que hay es que darle de comer. Y "las prisas pa' malos toreros".


Imágenes: Diario de Sevilla, Ignacio Sánchez Mejías, La Razón.

Romero Salas

lunes, 27 de diciembre de 2021

CURIOSIDAD: ¿Por qué la Puerta del Príncipe de Sevilla recibe ese nombre?



    Si bien es archiconocida por el orbe taurino, para explicar la curiosa nomenclatura de la Puerta del Príncipe maestrante, primero debemos cruzarla. Hay que pisar los tendidos baratilleros para entenderlo. El origen de este hecho reposa en el Palco Real que se halla detrás de la portada de la plaza más torera del mundo.
 





    El magistral y deslumbrante Palco del Príncipe fue finalizado en 1765, para el uso del Infante Don Felipe de Borbón -hijo del rey Felipe V e Isabel de Farnesio-, quien encabezaba entonces la corporación maestrante como Hermano Mayor de la misma. Es por ello que este "príncipe" español es quien da nombre a la Puerta Grande sevillana. También se le identificaba como Felipe de Parma, al recibir en 1748 el citado ducado italiano en el segundo Pacto de Familia con Francia. 




    Desde entonces, el Palco del Príncipe de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla sirve para uso exclusivo de algún miembro de la Corona que asista para presenciar la corrida. Cabe destacar también que a partir del reinado de Fernando VII, el cargo de Hermano Mayor de esta cofradía de caballeros lo ostenta el propio Rey de España. El actual, como resulta evidente, es Su Majestad Don Felipe VI, desde 2014.







    A la izquierda de la balaustrada de albo mármol se ubica el palco presidencial, ocupado por el presidente de la corrida y sus dos asesores. Además, a diferencia del resto de cosos taurinos, donde se han de cortar un mínimo de dos orejas para salir a hombros por la Puerta Grande, la Maestranza es caracterizada por la necesidad de cortar tres, lo que la impregna de mayor seriedad y rigor si es que cabe. Cuando se cortan dos orejas entre las tablas hispalenses, el torero sale a hombros por la Puerta Principal, que es por la que se accede al Patio de Cuadrillas desde la calle Iris, confundida usualmente con la Puerta del Príncipe en cuestión, en la zona casi opuesta de la plaza, que mira hacia el Paseo Colón y por consiguiente al torero barrio de Triana.

    Así pues, la fecha de la primera apertura de la Puerta del Príncipe no se conoce con certeza, pues se suele hacer referencia a 1952, aunque fue el propio Juan Belmonte quien narró algunos pasajes sobre cuando la cruzó en una fecha muy anterior. Sin embargo, se recuerdan gratamente tardes como la del 19 de abril de 1970, donde la terna completa -compuesta por Pepe Limeño,  Palomo Linares y Florencio "El Hencho"- obtuvo tal privilegio tras matar una corrida de Miura. Por otro lado, cabe destacar la inalcanzable cifra de cinco ocasiones en que Curro Romero la atravesó tras escuchar el verdadero "ole" de Sevilla, tan raramente audible por la mayoría de los toreros.





    Asimismo, la última vez que este umbral maestrante ha sido cruzado a hombros fue el pasado 26 de septiembre de 2021 por el joven rejoneador Guillermo Hermoso de Mendoza, siendo a su vez el sevillano Pablo Aguado el matador postremo en atravesarlo, el 10 de mayo de 2019.


P.D.: Si en alguna ocasión tiene la oportunidad de pasear frente a la 
Real Maestranza sevillana, acérquese a la Puerta del Príncipe, y por una ranura a 
una altura no muy elevada podrá vislumbrar el interior, como se aprecia en la imagen superior.



Aprovecho para desearle unas Felices Fiestas y un próspero 2022, también colmado de triunfos y Puertas del Príncipe.



-Bibliografía (digital): 
        https://www.diariodesevilla.es/toros/miurada-apoteosica 
        https://realmaestranza.com/real-plaza-de-toros/la-plaza/
        http://ptaurinabilbaina.blogspot.com/2019/05/la-puerta-


-Imágenes:
        https://www.mundotoro.com/noticia/el-rey-d-juan-carlos-
        https://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Lorente-infante-felipe
        https://buendiatours.com/es/guias/sevilla/plaza-toros-maestranza
        Archivo personal de autor



Romero Salas





miércoles, 8 de diciembre de 2021

CURIOSIDAD: ¿Cuál es la única ganadería popular que hierra sus toros en el costillar izquierdo?

  


  Resulta curioso que, aunque casi la totalidad de las ganaderías bravas llevan a cabo el herradero en el costillar derecho del animal, la prestigiosa Baltasar Ibán lo hace en el lado opuesto. Frente a esto no existe ninguna razón determinada en concreto. Simplemente se alude a la tradición o al capricho. Incluso existen fincas en las que a los machos se les hierra en el costillar derecho, y a las hembras en el izquierdo, y viceversa.

    Sin embargo, la madrileña ganadería de la divisa rosa y verde no es la única en poner en práctica esta labor campera de la citada manera: también destaca por ello la casa Cortijoliva, sita en Alcaudete de la Jara (Toledo).

     Otra connotación de tantas que caracterizan y enriquecen la inigualable dehesa del toro de lidia.


Imagen: Asociación El Toro de Madrid

Romero Salas

domingo, 7 de noviembre de 2021

ANÉCDOTA: ¿De dónde procede el dicho "hay gente pa' to"?

 


     En un almuerzo se hallaban el matador de toros Rafael "el Gallo" -hermano del malogrado Joselito-, así como el aficionado José María de Cossío, y también el filósofo raciovitalista José Ortega y Gasset. 

    Al término de dicha reunión, quedando tan solo Rafael y José María, el maestro se dirige a Cossío para preguntarle que a qué se dedicaba el hombre tan simpático con quien habían estado charlando. A esto que el escritor le responde entre risas que era el filósofo Ortega y Gasset. Pero al no quedar el diestro del todo satisfecho, volvió a cuestionar cuál era su labor, a lo que su contertulio vallisoletano respondió que se dedicaba a pensar. Finalmente, esto suscitó un gran impacto en el torero conocido como "Divino Calvo", añadiendo éste con gracia y torería:

 -¡De verdad: hay gente pa to'!


Imagen: Los Sabios del Toreo

Romero Salas


sábado, 30 de octubre de 2021

CURIOSIDAD: ¿Cuál es el gran enigma del comportamiento del toro?

 


     El problema gigantesco de la Fiesta es el desconocimiento que de ella tienen los antitaurinos. La tauromaquia -como cualquier otra cultura- puede gustar o no. Esto es lógicamente indiscutible y respetable. Pero si por algo se caracteriza un partidario de la abolición de las corridas, es por hablar sin conocer. Pues bien, existe un curioso enigma que hasta la fecha ni siquiera los taurinos hemos podido desvelar. Éste no es otro que la embestida del astado, diferente por un pitón y por otro. 

     Fruto de ello es la necesidad de lancear al toro con el capote en los primeros tercios de la lidia, de manera que el matador pueda percibir por qué pitón prima una acometida más humilladora, enclasada y templada, y a su vez conocer por qué mano fundamentar su faena de muleta. Un secreto de tantos ocultado por la sabia Naturaleza.

 

Imágenes: autor; Eco de Teruel

Romero Salas


sábado, 16 de octubre de 2021

CURIOSIDAD: ¿Por qué no es beneficioso darle capotazos en exceso al toro en banderillas?

 



     Como naturalmente todos los aficionados a la Fiesta Nacional dan por sabido, en la faena o tercio de muerte, el burel se va desfondando conforme va avanzando el número de muletazos. 

   Así pues, tras su acometida al caballo de picar, en la lidia de los garapullos desempeñan un papel fundamental los hombres de plata encargados de bregar con el percal. Deben ellos tratar con suavidad al astado, sin apenas forzar su embestida, y lo más crucial: proporcionarle la menor cantidad de capotazos posible al colocarlo en suerte para el cuarteo de banderillas. La finalidad de esto no es sino que el bicorne aguante lo máximo de las posibilidades cuando llegue a la franela del matador, ya que, como dato curioso, afirman los maestros veteranos que "un capotazo dado al toro equivale a dos muletazos menos en la faena".


Imágenes: autor, Eco de Teruel
Romero Salas


martes, 12 de octubre de 2021

HISPANIDAD: ¿Cómo fue el peculiar y "español" brindis de Rafael de Paula en Las Ventas?

 

    Vistiendo un singular terno café con leche y tabaco con remates blancos, el maestro de Jerez abrió los brazos en su magnífico lance de humor, arte y gracia gaditana. En la corrida de la Beneficencia de 1989, y Las Ventas de Madrid como escenario, brindó la muerte de un astado de su lote a Su Majestad el Rey Emérito Juan Carlos I, quien presidía el palco real, diciendo como sigue: 

"Señor, es para mí un gran honor brindarle a usted la muerte de este toro. Le deseo toda la suerte del mundo para usted y para España. Y ahora deséemela usted a mí a ver cómo escapo yo con éste".




    Tras ésto, los espectadores afortunados de haber escuchado dicho brindis, rompieron en carcajadas. No era para menos. Únicamente a la altura del maestro Paula.

Romero Salas

Por los cielos luce altana

 


Con chaquetilla de grana,
Con alamares de oro,
Al son de boyante toro
Por los cielos luce altana.
Y cual sonora campana,
sobre la viva espadaña
se ensaña y nos desentraña
con deslumbrante alboreo
que España sin el toreo:
ni hay toreo ni es España.


FELIZ DÍA DE LA HISPANIDAD
VIVA ESPAÑA
Y SU FIESTA NACIONAL

Romero Salas

lunes, 11 de octubre de 2021

CURIOSIDAD: ¿De dónde procede la expresión "a porta gayola"?

 


   Esta célebre frase taurina presenta origen portugués. "A porta (da) gaiola", lo que en el español se suele escribir "a porta gayola", significa literalmente en la lengua lusa "puerta del toril o celda". 

     Por ende, en el argot taurino, viene a ser la popular y valiente suerte de recibir al toro, recién salido de chiqueros, de rodillas mediante una larga cambiada, mirando de frente al portón de toriles.


Imágenes: La Razón, Eco de Teruel

Romero Salas


sábado, 9 de octubre de 2021

CURIOSIDAD: ¿Por qué los picadores pueden vestir chaquetilla bordada en oro como los matadores?

 


    Antaño, cuando la sociedad estaba dotada generalmente de un carácter rural, existía en la tauromaquia una primacía del toro sobre el torero. Es por ello que en los carteles se anunciaba con mayor protagonismo el nombre de la ganadería, cuyos bicornes serían lidiados en la plaza. De este modo, el respetable, al estar familiarizado con los animales del campo, sabía valorar y reconocer más la condición de los astados, y por este motivo debían corresponder los picadores y sus caballos, ahormando la embestida con la vara. Es a partir de ese momento cuando empiezan los varilargueros a adquirir relevancia en el toreo, hasta tal punto de anunciarse también en los carteles, y vestir el oro en su indumentaria.

    Sin embargo, allá por el siglo XVIII, pese al riguroso criterio de los maestrantes hispalenses, los matadores comienzan a manifestarse para, de alguna manera, cobrar algo de importancia en la lidia. Consiguen los diestros la licencia de vestir la plata, sobre unos vestidos diseñados por los propios espadas, hasta el año 1830, cuando Francisco Montes "Paquiro", tras fijarse en las vistosas vestimentas de los invasores franceses de la época, establece el parámetro común del traje de luces, el cual hoy día conocemos, con ligeras variaciones. Los piqueros y matadores se encontraban entonces al mismo nivel de relevancia. No obstante, en la actualidad, desafortunadamente los segundos se superponen sobre los primeros.


Imágenes: archivo personal ; Eco de Teruel

Romero Salas


viernes, 8 de octubre de 2021

CURIOSIDAD: ¿Qué significa el lugar que cada torero ocupa en el paseíllo?

 

Paseíllo en Lucena (Córdoba)


    Entre la indescriptible vistosidad y ambiente que se cuecen al son de los pasos de los matadores en un paseíllo, suele pasar desapercibida esta curiosidad, la cual viene siendo a su vez una ancestral tradición. En su desfile a presidencia, tras la apertura del mismo por parte de los alguacilillos, se dispone a la izquierda el matador más antiguo en alternativa, mientras que el segundo de la terna se coloca en el extremo derecho, quedando el más novel acartelado en el centro. También cabe resaltar que aquel que debute como matador de toros en determinada plaza, o bien tome la alternativa, deberá caminar destocado.

    De esta manera, detrás de los diestros, se colocan primeramente -en línea horizontal- los tres banderilleros de la cuadrilla del primer espada. Tras ellos, siguen los hombres de plata del segundo coleta, y así, de manera sucesiva, los subalternos del tercer maestro. Por otra parte, los picadores cabalgan sus equinos por orden de intervención en la lidia, precediendo el alegre caminar de los monosabios y mulilleros, quienes concluyen la irrupción de cada festejo a los compases de un vivo pasodoble. La Fiesta en su máxima expresión.




Imágenes: archivo personal ; Eco de Teruel
Romero Salas


sábado, 2 de octubre de 2021

En er mundo

 


    Esas hubieran sido las palabras del maestro Juncal al traspasar la puerta de Las Ventas esta misma tarde. Con la inestimable compaña del lucentino Búfalo, era el calificativo idóneo para la lección de toreo que Emilio de Justo ha esparcido sobre el albero madrileño. El Obispo del temple ha vuelto a girar la llave de los dos barriles que caracterizan su personal estilo: el concepto poderoso, y a la misma vez el artista. Una innegable conjunción de valor en su milimétrica y precisa medida, y de pellizco anudado en el fajín de la autenticidad y la verdad... ese fajín que tan pocos son capaces de amarrarse. Mientras, la plaza de la calle Alcalá haciendo lo propio. 




    Un torero que anda, como quien dijera al mismísimo Faraón de Camas, "pidiendo poetas". Enfundado en un obispo y oro tocado sobre las cuatro puntas de la cruz por Nuestro Señor Jesucristo, y frente a un cabestro bravo como la Puerta Grande venteña, De Justo buscaba justicia. Y el amén de los amenes se posó en una serie por abarrotás trincherillas, acariciando suave, muy suave, a ambas orejas que tarde o temprano iban a caer en manos del maestro extremeño. Y al fin se hizo justicia. En er mundo.

Imágenes: capturas del resumen de la corrida, de Movistar Toros.

Romero Salas

viernes, 1 de octubre de 2021

Una mala digestión de torería

    Para salir de la plaza más torera del planeta pegando naturales al viento del hispalense Paseo Colón. Hoy, las afortunadas cadenillas de la Puerta del Príncipe se han mecido levemente, como escribiendo la historia de una empolvada tauromaquia del siglo XIX, mas con las flemáticas agujas de un reloj casi sin pilas, y los vivos colores propios del presente XXI. Y el "No hay billetes" luciendo en la taquilla.


    Primeramente, nos echamos las manos a la cabeza con la charanga carnavalera de Morante en forma de vestido, que no de torear. La calle Iris se cruza vestido de torero... y las chirigotas para febrero.

    Seguimos metiendo la pata gracias al "pluscuamdesclasado taurinucheo" del Sr. Presidente, omitiendo a la torera el prestigio del palco que ocupa, y por tanto al que debe corresponder según merece. Se disponía el usía a mostrar pañuelos -verde inclusive- a destiempo y sin coherencia, como quien se pone a tender la ropa una bonita tarde de octubre recién salido de chiqueros. Para ser presidente, primero se ha de ser buen aficionado. Es lo básico.

    Afortunadamente, conduce el cauce de la tarde el magistral retorno a las esencias del toreo, por medio de una sublime fusión de Gallito en el pasodoble y Belmonte en el albero, según el intachable corte clásico y puro de Juan Ortega. Leyendo en los mismos medios la Sacratísima Primera Lectura y el Salmo. La Segunda vendrá más adelante...




    Pero después de la de cal, naturalmente viene la de arena. El vendedor de mantas, Roca Rey, al que no sé quiénes llaman "mandón del toreo", no manda -desde mi modesta perspectiva- ni en su mercadillo de trapillos. Trapazo para acá y trapazo para allá; pedirle permiso para iniciar la faena a D. Gabriel Fernández desde su ya citado tendedero, que lo haga otro; mejor aburrir hasta el hartazgo a la afición sevillana, desbordada y emborrachada de toreo de quilates, con un "alcayateo" chabacano, arrojando por supuesto la pureza al río Guadalquivir. Toreo sin sentimiento, sin verdad. Sin alma. Si el toreo no tiene alma, el toreo no existe.

    Para colmo, el vomitivo paripé de una banda sustituta de Tejera -o al menos eso quiero creer, mas en vano-. Tristán y sus absurdas directrices como Periquillo por su casa. Menos mal que estuvo bien "fajao" Morante pa' ponerle las cosas en su sitio. Al fin llega. Morante. Solo Morante. La tarde del uno de octubre de dos mil veintiuno va siendo atronada con ese nombre grabado en el costillar derecho. Actuación exclusiva del cigarrero desde su verdadero museo viviente de las suertes más añejas de capa, hasta demostrar una vez más de tantas la infinita honradez que atesora, saliendo por su propio pie con dos orejas en el esportón. 



    Bendita borrachera de toreo de pata negra. Hoy se ha visto en la capital del toreo a Murillo y su pincel... a Juan de Mesa y su gubia... a Camarón y sus bulerías... a Morante y su todo. Abandonao. Morante al 99% de plenitud. De haber puesto los rehiletes sobre una silla de enea... ya tendría sucesor el maestro Ruiz Miguel, cincuenta años después del último rabo de a pie concedido entre las tablas más bellas del universo.

    Y vaya digestión más mala de buen toreo a raudales se le queda a uno. Tarde de alborotos incesantes. Pero historia viva del toreo. Morante y Sevilla.


Imágenes: capturas del resumen de la corrida, de Movistar Toros.

Romero Salas

jueves, 23 de septiembre de 2021

Obispo del temple

     De obispo y oro atravesaba la torera calle Iris esta tarde, su tarde. La de chispazos y tinieblas, de oles "desbocaos" y gajes del oficio. Hoy los excelsos arcos de la Maestranza han visto torear. De obispo y oro llevaba atornillado a un victorino por naturales. Homilía grande de pura colocación, autenticidad sobre el albero más exigente del planeta y fidelidad a un concepto difícilmente igualable.

    Tras eternos meses de pedir la vez y con el número en la cola, ha pedido sitio Emilio De Justo. Se oyeron las bulerías en forma de chicuelinas, los tangos por trincherazos... y un puñado de "ayudaos" por alto levantando a la afición sevillana del ladrillo visto. Un verdadero brindis, con lápiz y papel en lugar de montera, a los amigos empresarios.


 

    Se susurraba entre asientos que por efímeros instantes se transformaba el amarillento ambiente baratillero en un añejo blanco y negro. Algunas estampas tan puramente clásicas duraban más de lo usual. Decían los maestros, satisfechos y sin dudar, que estaba en los medios el secreto del toreo caro. En redondo, daba un diestro de chorreras largas y hombreras caídas una enrazada lección de temple, el temple que conduce a la llave. Esa preciada y ansiada llave. La que abre la Puerta de las puertas. Pero se tuvo que ir en un mísero pinchazo de sitio feo. Estaba ya impreso en las portadas de los periódicos de Sevilla. El Obispo del temple llegó a saborear la Puerta del Príncipe, mas esfumándose ésta cual larga cordobesa.

Imagen: Maestranza Pagés.

Romero Salas

domingo, 19 de septiembre de 2021

Las yemas de Triana

     Era el momento. Cuando a El Fandi no le jaleaban ni los propios subalternos con unos garapullos aparcaos casi en la penca del rabo -por supuestísimo de los supuestos, con el toro en la Torre Pelli-, y frente a los pseudo-arrimones de Manzanares, con más meneos de pies que Farruquito en un tablao, al fin se hizo la torería sobre el albero sevillano, de verde esperanza y oro.



     Esperanza, la que Juan Ortega venía sembrando entre aficionados. Y qué grande su fruto. Esperanza de la calle Pureza, quien frente a la Puerta del Príncipe y a la misma vez a sus espaldas, tenía ya el pañuelo sobre su excelsa mano diestra para pedirle la oreja a quien, con Pureza y sin prisa, ninguna, se ha "entretenío" esta tarde en reescribir el Juan Belmonte, matador de toros con un percalillo en sus yemas, las yemas de Triana, cosido a la cintura por soleás. Mientras tanto, los relojes como estatuas. Y la batuta de Tristán al viento. Privilegio auténtico. Arreando figuras.




Romero Salas

sábado, 18 de septiembre de 2021

Hoy no era el día


    No lo era. Los astros no se habían alineado. En el paseíllo se chafó el asunto. El desordenado desfile sin música ahogado en un ruidoso minuto de silencio, la desgana de Morante desde el capote en su primero, la pata "patrás", el "alcayateo" barato y la banda comprada de Roca Rey, la malograda rodilla y la plata sin ley de Pablo Aguado, la bondad excesiva de los victorianos que ni las Hermanitas de la Caridad -tan meritorias como totalmente respetables-... Todo ha desembocado en una fusión entre la hambre y las ganas de comer. Y qué mal cae en el estómago una decepción del tal talante ante una tarde de semejantes expectativas. Y qué falta nos hace otro apoteósico 10 de mayo de 2019 entre los arcos maestrantes...



    La de hoy ha sido una tarde de destellos. De simples pinceladas. De quites medio lujosos que los esporádicos "oles" que lograban arrancar no tardaban en decirnos "hasta luego, Lucas". Cuatro cositas pero han faltado tanto toros, como toreros. Llegó el Morante esperado pero se fue su estoque. Su toreo de caviar rodilla en tierra y los molinetes y afarolados tan puramente joselistas picaron billete en la suprema suerte de matar. Y poco más tenemos de qué hablar. La ansiada reapertura de Sevilla, empapada por la infamia del ambiente. Hoy no era el día. Se habrán comido más pipas de la cuenta, pero todavía quedan ternas guapas para disfrutar del corte auténtico en el coso más torero del planeta.

Romero Salas

    

Dos cadenas de terno grana y plata


 

Dos cadenas de terno grana y plata

despiertan hoy de oro su rechinar;

mientras septiembre se torna a "abrilear"

trasiega ya la Puerta de escarlata.


Bajando pues la dulce escalinata

se empeña la Señora en contemplar

tal rostro de magisterio ejemplar:

el bético fluvial ya lo constata.


Con aros se engalana el bello puente;

la torre más hermosa y su mantilla,

ellas palpando el añorado ambiente.


De luces deja un rastro la cuadrilla,

y a expensas de señal del presidente

ya se oyen los clarines en SEVILLA.

Romero Salas

martes, 14 de septiembre de 2021

Que alguien me lo explique

    


      A ser posible. No lo consigo entender del todo. En ocasiones, hacen falta tardes como la de hoy para abrir bien los ojos y saber diferenciar entre circo barato y toreo del auténtico. Sobra con que usted, estimado partidario de la "Fiesta más culta del mundo", levante ligeramente la vista sobre estos modestos renglones y piense en las primeras cinco "figuras del toreo" que a la cabeza se le vengan. Solo cinco, si no tiene inconveniente.


     Tras esto, me atrevo a afirmar que entre las mismas que acaba de pensar, seguramente se incluye algún "maestro" como Roca Rey, El Juli, Manzanares, El Fandi, Perera... y por desgracia un largo etcétera. Es inevitable. Queramos o no. Pues bien, en esta segunda petición me gustaría que analizara a fondo cada uno de los conceptos del toreo propios de los diestros anteriormente citados. Y, hombre, puestos a analizar... no me dé usted el 'malrato' de decirme que echan la "pata palante", citan dando el pecho, no abusan del pico de la muleta, etc. No me mate de tal susto. Y qué pena que esté en peligro de extinción el criterio taurino que se oponga a la falsedad torera que raramente no nos cuelan, a cambio de un pastón en nuestro paso por taquilla. Y ellos, en cambio ¡a vivir del figureo en lo alto del escalafón! Mientras, toreros con verdad y de corte pata negra se hallan en la más abyecta miseria.

    Ahí los ve. En tierras albaceteñas han trenzado el paseíllo esta tarde dos de ellos. Y qué recital. Quien quiera ver valor, exposición -de la buena-, autenticidad... ocasión idónea le presento. Le cedo la palabra a las imágenes.





    Empezando por que así se viste a un torero cogido en la enfermería (y no como hace escasos días nos teníamos que tapar los ojos en una novillada en Molledo), fíjese usted en cada detalle, cada pincelada de toreo caro, desafortunadamente, difícil de disfrutar todos los días. Se cita de frente como los tíos y para otra cosa se sube uno al tendido. 





    Le muestro ahora cómo presentan ambos espadas la franela frente al toro. ¿Dónde está el pico de cigüeña que con tanta frecuencia le quita el puesto al matador? Así se pincha la ayuda en la pañosa. Y como le dijo el padre de Búfalo a su niño recién aficionado a la Fiesta Nacional en el Puerto de Santa María: "esto no lo vamos a volver a ver en nuestras vidas".



    Desde mi honesto punto de vista, ser torero significa dedicarse a jugarse la vida. Por tanto, mis más sinceros respetos hacia Rubén Pinar y Sergio Serrano. Han definido a la perfección esta bendita profesión. Grandes lidiadores moldeados a fuego lento, fuego de campo, de bravura exigente, de la que te mira de reojo con aires de Albaserrada y no queda otra que tragar paquete. Los toros de Victorino, para Sevilla y con más teclas que el piano de Dorantes. Pero había toreros pa' rato. Gracias, maestros.



Imágenes: Castilla la Mancha Media

Romero Salas